Johanna Ehde
Andrés G.Vidal
Aguda, ligera, estridente
Arte sonoro/Instalación
8.11.19 / 1.12.19
Aguda, ligera, estridente
Del 8 de noviembre al 1 de diciembre, el Museo de Arte Contemporáneo José María Moreno Galván acoge la Muestra “Aguda, ligera, estridente” de Johanna Ehde y Andy G. Vidal.
Las crisis también pueden ser expresadas mediante el sonido, y específicamente mediante el ruido, que funciona perfectamente como una economía de la disrupción.
El ruido contiene un remanente negativo. El ruido implica perturbación, interferencia, molestia. El ruido se convierte en materia fuera de lugar. Sin embargo, esto no significa necesariamente, disrupción bajo cualquier medio. Aceptar el ruido y lo disruptivo puede implicar aceptar lo múltiple, lo plural y el rechazo de categorías y jerarquizaciones.En este sentido el ruido puede considerarse un método para “poner en crisis” aquello que es discriminatorio.
Cuando no existe pluralidad en la escritura de la historia (ni en la historia de la tipografía), un único tipo de voz es constantemente reproducido en un único tono y forma, mientras que sonidos e historias “desviadas” permanecen en los márgenes, fuera de los libros, silenciadas por la historia.
Aguda, ligera, estridente captura la voz de una tipografía desarrollada a partir de medios ruidistas. Su resonancia se articula en estrecha relación con construcciones culturales en torno al género y el sonido. Nos referimos al silenciamiento de la voz “femenina” y la voz “del otro”. Aguda, ligera, estridente se reapropia de esta ideología y adopta a través de varias instalaciones, los sonidos considerados femeninos como una forma de ruido subversivo.