Burguillos

Jaime Burguillos se trata de uno de los artistas más importantes de la renovación del panorama pictórico sevillano hacia la contemporaneidad. Con obras en colecciones de máxima importancia, tanto en España como en el extranjero, fue, a pesar de que esta etapa es muy desconocida, un magnífico pintor de figuración hasta los años 50.

Será ya en la década de los 60 cuando evolucione hacia una abstracción personal que no le abandonará a lo largo de toda su producción. Esta abstracción serena es muy reconocible, estereotípica en su obra, y la crítica ha calificado como “remanso de paz”.

De gran lirismo, su obra representa una atmósfera propia, con pinceladas de gamas cromáticas afines que parecen fundirse para crear un espacio evanescente, misterioso o casi fantasmagórico, que fascinó, en distintas épocas a galeristas como Juana Mordó o Rafael Ortiz, a coleccionistas americanos y a instituciones andaluzas, como la presidencia de la Junta de Andalucía, que eligió obra de Burguillos, muy similar a la obra presente en esta colección, para decorar sus estancias principales en el Palacio de San Telmo.